viernes, 22 de agosto de 2008

El imperio contra ataca


Bombarderos norteamericanos sobrevuela el altiplano boliviano.

Luego de una difícil lucha, un dirigente cocalero llega al gobierno en Bolivia. Evo Morales lleva casi tres años en el Ejecutivo y el gran imperio del norte lo mira con preocupación. Después de la nacionalización de los hidrocarburos para evitar que la riqueza boliviana se siga fugando al extranjero a Evo Morales han comenzado a perseguirlo los fantasmas del golpismo; los mismo que un 11 de septiembre de 1973 acabaron con la vida de un presidente socialista democráticamente elegido. Miguel Allende, quien debió nacionalizar el cobre chileno para afrontar la crisis, le quito a las mineras privadas, vinculadas a capitales norteamericanos, la más fácil manera de robarle la riqueza a ese país de estrecha y larga costa.

Ante esta actitud del presidente chileno, el imperio se permite intervenir en defensa de la “democracia” y sus intereses; así el “grande del norte” se encarga de agudizar la crisis, subvenciona paros, huelgas y desabastecimientos en los principales mercados populares. No conforme con esto, dos bombarderos, dirigidos desde Washington, acabaron con la vida del presidente en el Palacio de La Moneda y Pinochet fue colocado al mando del gobierno, para poder aplicar la flamante política neoliberal con un alto costo social.

Hoy a pesar de haber recibido el apoyo popular en el referéndum del último 10 de agosto (Eduardo Stein observador de la OEA avaló los comicios), al gobierno de Morales pretenden desestabilizarlo algunos grupos de poder relacionados a capitales extranjeros y vienen usando como pretexto un separatismo en busca de la “autonomía”, una autonomía que acabaría con las políticas sociales del Presidente como, el bono escolar Juancito Pinto que se otorga a los escolares de los primeros cinco grados; y la renta Dignidad para las personas mayores de 60 años. Será acaso que los prefectos opositores no desean el bienestar del pueblo boliviano, podrá el imperio contra atacar un país democrático que ha optado por una política de izquierda más justa y solidaria, como en otrora lo hizo en Chile contra el gobierno de Allende.

1 comentario:

stalin1953 dijo...

interesante...sigue a ver si me sorprendes...esta bueno